Odontofobia (parte IX)
La semana pasada estuvimos analizando algunas frases que sería recomendable no decir a los pacientes porque podemos llegar a conseguir justo el efecto contrario de lo que pretendemos con estas “frases tranquilizadoras”: ponerle más nervioso y generar en él un sentimiento de culpa. Es fundamental que el paciente sienta que nos identificamos con su malestar, que tratamos de comprenderle. Para ello es muy importante: no dar nada por supuesto, preguntar y dar información de todo, aunque se considere algo básico; mostrar interés por el bienestar del paciente en todo momento; adelantarse a las dudas o inquietudes que pueda tener; explicar lo que se va haciendo y animarle a lo largo del proceso. Con esto tratamos de ganarnos la confianza del paciente. Así estará más tranquilo y, por tanto, será más colaborador. El objetivo principal es que el paciente perciba que nos ponemos en su lugar, es decir, que perciba, por parte de su odontólogo, EMPATÍA. A continuación vamos a ver algunas...